21 de agosto de 2007

Escucho voces auténticas

No son rubias de ojos celestes. No tienen las tetas ni la nariz operada. No cantan por dinero, ni quieren ser millonarias o famosas, el abismo de los abismos de este mundo. No tienen un conocido que sea conocido de un mandamás del mundo del espectáculo (no son unas enchufadas, decía). No fingen orgasmos encima del escenario. No son apáticas con el público una vez que descienden de los escalones. Ninguna pretende superar a las otras en su carrera profesional (no hay codazos ni pisotones). No cantan en Colón (aunque se esmeran como si). No pretenden llegar a Gran Hermano, Cantando por un sueño (si no existe, ya existirá en breve) o algún otro concurso para idiotas confesos en la televisión. Ni tampoco sueñan con conducir un programa para el resto de los idiotas que, cada día, durante largas horas, completan su proceso de idiotización frente a un electrodoméstico (no me refiero al microondas, pero casi).


lapercantaescuchovoces.blogspot.com

Sí, en cambio, cantan por amor al arte. Sí ensayan a cambio de 0 (CERO) dólares (al menos hasta ahora). Sí se ríen cuando sienten la risa o gritan cuando se les viene en gana. Sí son humildes frente al público. Sí entienden lo que es un espectáculo de calidad. Sí entienden que su séquito, por más menudo que fuere, no es idiota confeso. Sí tienen un sentido colectivo de la producción artística -son seis voces-. Sí dividen las maderas del escenario de forma equitativa. Sí saltan pese a que sus tetas midan más de los parámetros preferidos por las agencias de modelos. Se trata, en cuestión, de un auténtico grupo musical, el sexteto de murga La Percanta (Escucho voces).


lapercantaescuchovoces.blogspot.com

No hay comentarios: